Comunicación
Regadhigos aúna tradición e innovación en la producción y comercialización de higo seco
Produce un millón de kilos anuales y exporta Estados Unidos y Sudáfrica entre otros países. La cooperativa ve en la higuera un gran futuro a medio plazo y está apostando por incrementar su producción para abastecer a todos sus clientes
El cultivo del higo aúna sabiamente tradición e innovación y el mejor ejemplo de ello es la cooperativa Regadhigos, en Almoharín (Cáceres). La tradición la ponen los 350 socios, de los 510 con que cuenta esta cooperativa, que producen higo. Ellos realizan el secado del higo de forma tradicional y natural. La innovación la pone Regadhigos con todo el proceso que sigue el higo seco en sus modernas y amplias instalaciones antes de ponerlo en el mercado.
Un mercado cada vez más amplio para Regadhigos debido al incremento de consumo de higo que se está registrando y “al buen trabajo que hemos estado realizando apostando por la calidad de nuestro higo seco”, precisa el gerente de Regadhigos, Manuel Collado. Todo ello, está incrementando el número de clientes de esta cooperativa, cuyo mercado es mayoritariamente nacional, aunque desde hace varios años exporta también sus productos a distintos puntos del mundo, sobre todo Bélgica, Francia, Portugal, Polonia y Alemania, pero también a EEUU, Canadá y Sudáfrica.
Esa exportación se lleva a cabo con la marca ‘Good Fig’, mientras que en el mercado nacional la comercialización de sus productos elaborados (higo seco, higo enharinado, pasta de higo y mermelada de higo) se hace con la marca ‘La Tocona’. Y a todo ello se suma la tienda online con que cuenta en www.regadhigos.es para facilitar sus productos a todos los consumidores y llevarlos a su domicilio.
Pasado y futuro
La historia de Regadhigos se remonta a la década de los 70, cuando un reducido grupo de agricultores unió para potenciar su rendimiento como productores de higos. Tras unos años funcionando como una sociedad agraria de transformación, se constituyó Regadhigos como cooperativa en el año 1987 a fin de dar sostenibilidad al proyecto de producción y transformación de higo, además de incorporar otros cultivos a los que se dedicaban sus socios. Cultivos como el tomate, alcanzando una producción media de 5 millones de kilos al año; el maíz, con unos 3 millones de kilos anuales; y aceituna, que con una producción media de un millón de kilos al año.
La producción de su producto estrella, el higo, es de un millón de kilos en un año normal, lo que supone el 20% de la producción total de Extremadura, si bien este año esa producción ha badajo debido a la climatología, “lo que supone dificultades para poder abastecer todo el mercado que tenemos con la misma buena calidad que hemos mantenido siempre”, precisa el gerente de Regadhigos.
Así, apuesta por incrementar la producción para ser más competitivos, “porque la higuera tiene un gran futuro a medio plazo”, agrega Manuel Collado, quien señala además que Extremadura es la máxima productora de higos secos en España, con Almoharín y Regadhigos como principales valedores de ello.
De hecho, los socios de esta cooperativa están incrementando la superficie dedicada al higo, a la vez que los productores de nuevas plantaciones de higueras se están asociando a Regadhigos, con el objetivo de aumentar esa producción media a 1,5 millones de kilos al año para abastecer así a todos sus clientes.
Calabacita
La variedad de higo que se cultiva en Almoharín es la calabacita, un higo de pequeño calibre pero de gran sabor y con una textura delicada.
La recolección del higo seco se inicia a mediados del mes de agosto en una campaña normal y se prolonga durante un mes. Es entonces cuando los socios de Regadhigos comienzan a llevar su producción de higo seco a Regadhigos, que durante campaña tiene unos 60 trabajadores en fábrica. Es en las instalaciones de Regadhigos, que superan los 2.000 metros cuadrados entre las distintas plantas y dependencias con que cuenta, donde comienza todo el proceso de clasificación, elaboración y puesta en el mercado del higo seco en distintos formatos.
Todo este proceso en la cooperativa se desarrolla durante varios meses, puesto que vende higo seco durante todo el año a sus clientes “y en Regadhigos nos ocupamos de que puedan tenerlo recién elaborado desde agosto hasta abril”, explica Manuel Collado.
Un higo que se comercializa por todo el mundo en bolsas de medio kilo y cajas de 10 kilos con sus marcas La Tocona y Good Fig.