Estos cultivos afectados son los de tomate, olivar, cereales, viña y frutales en la zona entre Calamonte y Arroyo de San Serván, así como en la zona de Santa Amalia, Guareña y Torrefresneda.
Más de 3.100 hectáreas de cultivos, entre tomate, olivar, cereales y viña, se han visto afectadas según las primeras estimaciones por los daños ocasionados por la lluvia y, sobre todo, el pedrisco caído en la tarde del pasado unes en la zona entre Calamonte y Arroyo de San Serván, así como en la zona de Santa Amalia, Guareña y Torrefresneda.
Aunque aún es pronto para cuantificar la totalidad de hectáreas afectadas por este pedrisco, las previsiones apuntan a esta cifra, según datos de las cooperativas, que han comenzado a dar parte de estos siniestros por granizo, mientras que los técnicos de la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (UNEXCA) están realizando ya la gestión de los mismos y asesorando a las cooperativas.
En este sentido, aunque aún no se han determinado los daños totales registrados, en zonas como Calamonte y Arroyo de San Serván sí se estima por el momento que hay alrededor de 900 hectáreas de olivar afectadas por el pedrisco, 600 hectáreas de viña y más de 100 hectáreas de frutales bastante dañados, además de otras 100 hectáreas de tomate.
En la zona entre Santa Amalia y Don Benito el granizo ha perjudicado a más de 300 hectáreas de cultivo de tomate, así como alrededor de 40 hectáreas de cereal y frutales, según las valoraciones iniciales. Mientras, en Torrefresneda se superan las 200 hectáreas de cultivo de tomate afectadas por el pedrisco y alrededor de 300 hectáreas de maíz.
A ello se suman también daños registrados en Campo Lugar y en Guareña. En esta última localidad, a alrededor de 600 hectáreas de sandía, maíz, tomate y viña se han visto perjudicadas por el granizo.
Las pérdidas por estos daños se suman a las que ya viene soportando todo el sector agrario y ganadero por los altos costes de producción que debe soportar ante el paulatino incremento de los precios de los insumos, mientras que bajan los precios que agricultores y ganaderos reciben por su producción.
Aunque aún es pronto para cuantificar la totalidad de hectáreas afectadas por este pedrisco, las previsiones apuntan a esta cifra, según datos de las cooperativas, que han comenzado a dar parte de estos siniestros por granizo, mientras que los técnicos de la Unión Extremeña de Cooperativas Agrarias (UNEXCA) están realizando ya la gestión de los mismos y asesorando a las cooperativas.
En este sentido, aunque aún no se han determinado los daños totales registrados, en zonas como Calamonte y Arroyo de San Serván sí se estima por el momento que hay alrededor de 900 hectáreas de olivar afectadas por el pedrisco, 600 hectáreas de viña y más de 100 hectáreas de frutales bastante dañados, además de otras 100 hectáreas de tomate.
En la zona entre Santa Amalia y Don Benito el granizo ha perjudicado a más de 300 hectáreas de cultivo de tomate, así como alrededor de 40 hectáreas de cereal y frutales, según las valoraciones iniciales. Mientras, en Torrefresneda se superan las 200 hectáreas de cultivo de tomate afectadas por el pedrisco y alrededor de 300 hectáreas de maíz.
A ello se suman también daños registrados en Campo Lugar y en Guareña. En esta última localidad, a alrededor de 600 hectáreas de sandía, maíz, tomate y viña se han visto perjudicadas por el granizo.
Las pérdidas por estos daños se suman a las que ya viene soportando todo el sector agrario y ganadero por los altos costes de producción que debe soportar ante el paulatino incremento de los precios de los insumos, mientras que bajan los precios que agricultores y ganaderos reciben por su producción.
