El cierre del canal HORECA y la ralentización de las exportaciones agroalimentarias ha provacado una grave crisis que se agrava día a día en gran parte de las producciones europeas.
Cooperativas Agro-alimentarias de España considera que el paquete de medidas propuesto por la Comisión Europea es absolutamente insuficiente para afrontar una situación de crisis de mercado como la actual, consecuencia de la crisis del COVID-19, que ha obligado a cerrar el canal HORECA en toda la UE, a la vez que se han ralentizado las exportaciones de productos agroalimentarios, provocando una grave crisis que se agrava día a día en gran parte de las producciones europeas. El presupuesto destinado de 88,5 millones de euros financia sobre todo el almacenamiento privado en las producciones ganaderas, pero no tiene en cuenta las especificidades de la ganadería mediterránea, en vino se limita a adaptar la reglamentación y el aceite de oliva, que ya venía sufriendo la crisis por la guerra comercial con EEUU, ni aparece.
A juicio de Cooperativas Agro-alimentarias de España resulta sorprendente como la Comisión con su presidenta a la cabeza, Ursula von der Leyen, destaque el valor estratégico del sector agroalimentario durante la crisis del COVID-19 y, sin embargo, no proponga medidas de gestión de mercados con un presupuesto comunitario a la altura de la dimensión de la crisis que estamos viviendo. La Comisión es la garante del mercado único, por lo que las medidas deben ser europeas y financiadas adecuadamente. Sin embargo, observamos que actúa de forma tímida y se limita a dejar que cada Estado miembro resuelva su situación sectorial o particular, rompiendo la unidad de mercado y el principio de solidaridad financiera de la PAC.
Desde Cooperativas Agro-alimentarias de España defendemos que si la situación actual no tiene precedentes, la respuesta de la Comisión Europea con sus propuestas, y la de los Estados miembros y el Parlamento Europeo con sus decisiones, debe ser extraordinaria. Un presupuesto limitado y la falta de medidas de gestión de mercados es sencillamente inaceptable bajo todos los puntos de vista, no aborda la situación actual de muchos sectores y pone en peligro la campaña que viene.
La UE no puede permitir ceder en aquellas políticas y sectores que la definen como una unión política y no como un mero libre mercado. Es imprescindible apoyar al sector agroalimentario para garantizar el abastecimiento de alimentos, no sólo ahora, sino en el futuro, y para ello es preciso un paquete de medidas adaptadas a las circunstancias de la actual crisis.